domingo, 29 de septiembre de 2013

Pétalos y destino

Ha pasado tiempo sin poder tocarte, acariciarte y besarte… tiempo en el cual he sentido otros besos, caricias y emociones que me han hecho olvidar la rutina de echarte de menos y acostumbrarme a vivir sin ti.
He vuelto a querer y amar, a ver la vida con otros ojos y ser optimista como cuando me conociste. La oportunidad de ser feliz me rodea nuevamente, no solo en el amor, sino también en todo lo poco que tengo, a pesar de mis errores.
Sin duda  ahora todo lo que soy es gracias a ti; todo lo que siento se debe a ti. Tú me enseñaste inconscientemente a buscarme y a recorrer  mi corazón para conocerme a mí mismo, pero lo que aprendí más junto a ti, fue conocer el amor sincero, ese amor de saber que te pasaba, sin que me lo dijeses o esas paranoias que hacían atormentarme por saber ver lo que pasaría en el futuro, e incluso abriste tu corazón para conocerlo como el mío y poder cogerte la mano para guiarte hacía la luz.
A veces pienso que he cambiado con respecto a aquel niño que conociste, que me he vuelto más frió y más duro, una persona insensible que no le importa lo que le ocurre a su alrededor y solo pesar en mí, pero sé que es mentira, porque aún sigo siendo el  mismo niño tierno e inocente que no tiene miedo a enamorarse y poner las cartas sobre la mesa, sin miedo a perder, por creer ser un aventurero.
Recuerdo nuestra última noche en el que nos concedió la vida, acortando la distancia y  tener la oportunidad de entregar nuestro amor verdadero, porque el destino acabaría con lo nuestro.
¿Recuerdas las promesas que te hice? He hecho tantas promesas a lo largo de este tiempo que la mayoría las he roto porque no tienen significado para mí, excepto unas promesas que no me importaría cumplirlas, ya que cuando era aún pequeño… jure cumplirlas, y para que no se me olvidaran lo marque con fuego en mi corazón, porque eran para ti.

No sé qué nos tiene preparado el destino para el futuro… pero no me importaría que nos diera una segunda oportunidad para volver a quererte como antes, cumplir mis promesas y luchar por ti una vez más, porque eres la única por la cual he luchado a pesar de ser derrotado.

¿Por qué digo todo esto a pesar del tiempo?  Sé me hace raro decir todo esto, pero...  el niño que llevo dentro… te eligió a ti por ser la primera, por lo cual ese niño… sigue enamorado de esa niña que llevas aún dentro de ti, y sabe que esa niña también aún está enamorada de él, porque él fue quien le enseño amar y coger su mano cuando nadie quería hacerlo. Él piensa que el destino le aparto de ella,  por ello aun le está buscando en plena oscuridad, para coger su mano y no apartarse de ella, y acabar con esa maldita distancia.



Sé que desde que nos apartamos vivimos mentiras para volver e intentar ser felices, lo sé porque lo noto en el rostro de tus fotos y en mi parte... engañarme con besos y caricias que no siento. ¿Quizá la única verdad fuimos nosotros y lo que aportamos?.

sábado, 21 de septiembre de 2013

Despertar


Sostenerte entre mis brazos hasta que te quedes dormida y  hacerme enloquecer despertándome con tus besos.

sábado, 14 de septiembre de 2013

Pétalos.

Veo a un joven muchacho y a una joven muchacha que ambos se entregaron amor eterno, a pesar de que la multitud  y la distancia estaban en contra de ellos dos porque eran complemente opuestos, como la luz y la oscuridad. El muchacho lo sabía, pero también él  sabía que la multitud se equivocaba y que él podía hacerla cambiar, ya que la amaba tanto que no permitiría que ni la misma oscuridad le arrebatara a ella de su lado. La muchacha sabía que era imposible hacerla cambiar de opinión y lo único que conseguiría es tener en contra a la multitud.
Efectivamente la multitud se puso en contra del muchacho, pero él paso largas horas dedicándole su amor con sabios consejos, hasta que su luz penetro la oscuridad más fría de su corazón. Las largas horas de dolores de cabeza dieron su fruto, siendo aún felices junto al recuentro sus corazones tímidos como el de sus labios.
Recuerdo también como se sentía aquel muchacho al tenerla al lado... sin duda se consideraba la persona mas feliz del mundo por coger su mano y por poder besarla mientras que perdían la
 noción del tiempo acariciándose  y contemplándose tenerse uno al lado del otro.
Sin embargo a veces el tiempo hace estragos como en esta historia que se acabó, pero no fue fácil de acabar con la ilusión, el optimismo y la energía que desprende el muchacho, a pesar de las pruebas que le obstaculizaron en su camino, porque a día de hoy aunque no tenga nada... sé considera una de las persona mas feliz del mundo y el recuerdo de la muchacha de esta historia... Aún lo guarda con alegría en su corazón.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Pasión y Lugar.

Estar al lado de alguien que no solo te gusta, si no de sentir tu corazón palpitar desenfrenadamente como nunca nadie lo ha hecho antes con una sola caricia, a no ser que sea esa persona a la que quiere tu corazón. Sentir pasar sus dedos por tu cuerpo haciéndote erizar la piel  y mirar sus labios fijamente para desear que tus labios entren en contacto con los suyos.
Perder el control cuando recorre con sus suaves labios cada parte de tu cuello, agitando tu respiración y respirando profundo para no perder el control.
Es verdad que solo importa estar el uno y el otro para coger su mano y hacerla sentir segura contigo, y después caminar de noche a solas por la playa bajo la luna llena, o caminar por la montaña y parar cerca del lago, bajo 
la luna que refleja e ilumina  al bosque, y desatar esa pasión plasmándolo en el corazón con fuego de lava. Y hacer sorprender a esa persona esforzándote, pero también ver a esa persona sorprendida por tu esfuerzo, y saber que te quiere aún más y que su corazón no se equivoca, a pesar de que el tiempo haga estragos o errores que cometiste en el pasado.
Algunas veces el lugar también importa porque es donde se plasma la pasión, en donde el recuerdo perdura hasta la muerte y en el que el esfuerzo que haces por esa persona, lo haces para que sea feliz, porque su felicidad te hace feliz.

martes, 10 de septiembre de 2013

Viaje Vol. 4 Impulso y Fuerza

Ahora entiendo casi  todo…  más aún sigo perdido por este dolor que gobierna mi corazón, pero no significa que traicione a lo que siento, porque… lo que siento es tan grande… que doy mi amor y mi cariño a las personas que quieran ser ayudadas, por lo cual lo que siento no puede pertenecer a una persona, ya que sería de egoístas.
Estoy feliz porque sé que el dolor de las heridas que  tengo, hacen engrandecer a mi corazón con más ternura, cariño, pasión y amor, y esto me hace apreciar y fiarme de lo que siento. Creí que me volví duro como el diamante y frió como el hielo, porque lo que me afectaba para hacerme daño y caer en un pozo oscuro y hondo, al día siguiente se me pasaba.
A pesar de que empiece un nuevo reto que me abarcara mucho tiempo, me doy cuenta de que no tengo la necesidad de callar, por el simple hecho de que pierda o gane; y si pierdo, me agradara saber que abre perdido con estilo, sin embargo tampoco tengo la necesidad de desaparecer para conseguirlo, así que me todos los que me necesiten, me tendrán ahí, pero yo no daré el primer paso.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Viaje Vol. 3 Miedo

Por primera vez… ver hacia el futuro hace angustiarme y encogerme el corazón. Puede que sea lógico que sienta estas cosas, pero jamás  he sentido tanto miedo para no poder dormir desde hace tres días.
Solo espero tener fuerzas en conseguirlo, porque de lo contrario estaré jodido, sin apoyo y en un pozo sin salida.

domingo, 1 de septiembre de 2013

Susto

Bajo las ventanillas y piso embrague para dar marcha atrás. Al terminar, después de subir el volumen de la música y bajar las ventanillas, paso a poner primera marcha y acelerar lentamente. En menos de cinco segundos, acelero y paso a segunda. Era una noche tranquila para volver a casa ya que había menos coches que antes, así que acelero más para pasar a tercera.
Casi 70 km me hicieron perder la noción de tiempo, embaucandome junto al viento que entraba por las ventanillas, pero... asustado recordé que había cámaras en esa zona y baje 20 km.
Estaba por las a fueras de la ciudad y había pasado los controles; no había nadie y pase a cuarta a 70 km. La música y el viento me embauco olvidándome de todo el mundo y sintiendo que solo era yo y el coche. Estaba cerca de casa, así que no había necesidad correr a 110 km en un carril de 50 km. Baje la velocidad porque me acercaba a un ced del paso y no veía nada.
Veo que no hay nadie, y acelero rápidamente, cuando oigo…. “piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii”. Los pelos se me pusieron de punta… No recuerdo haber visto a nadie que se aproximaba cerca de mí, pero pude haber pagado un alto precio  que me hubiera costado la vida, ya que si hubiera venido a más velocidad aquel coche y no le hubiera dado tiempo a frenar, yo no estaría aquí contando esta historia.