sábado, 8 de octubre de 2011

Inexplicable


El sonido y la caricia del viento, me recuerdan que aún sigo existiendo y que mi alama está vacía junto a mi corazón partido.
La emociones que desato a diario en mi interior, reconstruye los miles de pedacitos de este corazón dañado, mientras que el sentimiento me invade como un huracán, dejando solo la huella de su construcción.
Lo que siento ya no importa… y a pesar de que me duela… ya no está, por el simple hecho de que lo olvide, en algún sitio oscuro de mi interior.
Parece que girase en torno a ello, porque me ataca constantemente… pero en la que no quisiera recordar. Siento en que si lo recuerdo, mis lágrimas… brotarían gotas de dolor, matando la poca ilusión que sostengo en la palma de este corazón vacio, en el que quedaría marcado durante días… o quizá meses.
No sé si me engaño a mi mismo pero pienso que ese dolor, se debe a ese vacío un siento, ya que al recordarlo, no me afecta… pero sigue estando en mi interior.
Aunque no derrame una lagrima físicamente, lucho para que no me quite la poca felicidad que aún conservo.
Sé que hay un jardín dentro de mí, en donde puedo observar, como el rocío de mis lágrimas derramas, en que conservo su hermoso verde. El fruto de la explicación, se encuentran debajo unas rosas, vigiladas por el dolor, junto a su amiga soledad, en el cual evitan que me acerque a verlo. Solo me queda esperar a que alguien las coja y las arranque para poder saber la verdad…
pero mientras tanto… solo me queda ignorarlo.